Llegada a Rotterdam

En esta jornada se realiza la ruta más larga en bicicleta de todo el viaje, pero valdrá la pena porque se visitará la ciudad de Dordrecht.

La ruta de hoy discurre por la isla de Goerre Overflakkee atravesando geométricos paisajes de pólderes, suaves dunas y dorados bancos de arena. A través del puente sobre el Lago Grevelingenmeer se llega a la isla de Schouwen Duiveland donde se hará una parada en Bruiniesse, ‘la ciudad del mejillón’, puerta de entrada a Zelanda. Disfruta de un agradable paseo por su puerto pesquero o disfruta de un café en una de las muchas terrazas del puerto deportivo. Tras volver a coger la bici, será un placer pedalear recorriendo el casco histórico medieval de Zierikzee, una verdadera joya situada en el estuario de  Oosterschelde. Sus serpenteantes calles, sus más de 500 edificios históricos y un impresionante puerto deportivo hacen de la parada en Zierikzee una visita imprescindible.  ¡Ah!, y no dejar de probar dos de los manjares más conocidos de Zelanda, los “bolo Zeeuwse” (bollos dulces de canela y mantequilla) y los "Schouws palingbroodje” (bocadillos de carne de anguila ahumada). Si se quiere profundizar en la historia local, visitar el Museo Marítimo donde se narran el glorioso pasado marinero y comercial de la zona. 

El Parque Nacional de Oosterschelde es un hábitat de estuario influenciado por las mareas. Las llanuras intermareales están sumergidas en marea alta y vuelven a emerger cuando la marea es baja, siendo un reducto perfecto para aves acuáticas. Además de las aves acuáticas que aquí se alimentan, también es un lugar favorito para las focas. La flora y fauna de  Oosterschelde se ha adaptado a tener tanto agua salada marina como agua dulce de los ríos. La ruta de hoy cruza el Oosterschelde por el puente Zeelandbrug yendo después a la isla de Noord-Beveland. Es como entrar en otro mundo. ¡Hay pocos turistas que lleguen tan lejos! Siguiendo en dirección oeste, pasando campos, pastos y pequeños pueblos see llega al famoso Oosterscheldekering. Es la barrera Storm Surge, la más  grande, ingeniosa y cara de las que hay en el “Delta Works”. Tiene 9 km de largo y conecta Noord-Beveland con Schouwen-Duiveland. Fue planificada en inicio como una presa cerrada, pero debido a la presión del lobby de los pescadores y de los conservacionistas, se instalaron 62 compuertas. Estas compuertas de acero están casi siempre abiertas, permitiendo que el agua del mar pase, con el objetivo de mantener el ecosistema de agua salada de Oosterschelde. Sólo se cierran si se espera que los niveles del mar superen los 3 metros. A medio camino de la barrera, en una isla artificial, se encuentra el  Delta Park  de nombre “Neeltje Jans”,es el lugar  turístico número uno de la región de Zealand. Esta zona ofrece al visitante la posibilidad de ver los elementos internos de la construcción del Delta Works, por qué fueron necesarios, cómo protegen la línea de costa y algunos datos sobre temas de medio ambiente. Pero hay más: un parque de atracciones acuático. Con un tobogán increíble, un show de leones marinos y muchas cosas más ...

La jornada de hoy aguarda con 21 km de paisaje costero en perfecto estado de conservación. Pedaleando por la costa de la isla Schouwen-Duiveland, se puede disfrutar de playas de arenas blancas y dunas móviles. El “Delta Works”, es una serie de 13 barreras costeras, compuertas y presas que recorren toda la costa de la región de Zeeland. Fue construido para proteger a las zonas interiores de baja altitud de las inundaciones, a la vez que mejoró de forma considerable los problemas de comunicación que históricamente tenía esta región. Las presas Brouwers Dam y  Haringvliet Dam, son parte del “Delta Works” y servirán para alcanzar las otras dos islas en la jornada de hoy. 

La ruta discurre por encima de las presas, con el mar a la izquierda y lagos a la derecha. El día finaliza en el pueblo de  Brielle. La ciudad fortificada con forma de estrella, con sus fosos, canales, murallas y bastiones, ha sido restaurada con gran cuidado siendo digna de admiración y contemplación.

El recorrido de hoy es corto, lo que significa que dispondrás de mucho tiempo para explorar la animada ciudad de Rotterdam.

Hoy, tras el desayuno, comienza el regreso a casa.